Seguidores

lunes, 18 de abril de 2011

Pasé mis años olvidado en una trampa.

En la guerra como en el amor todo vale y siempre queda un perdedor. Normalmente, pierde el que quiere más, al igual que en una mesa de Black Jack.
Me olvidaré de tu amor de garrafón, olvidaré de tus besos de Judás, hoy voy a darle a mi pobre corazón un par de capas de alguna pintura que borre las humedades que le han dejado tus recuerdos.
Mis sentimientos van en chándal y los tuyos visten de Dior. Una taza de té por favor para este desnatado corazón que poco a poco se desangra.
Hoy las penas, como la pasión duran poco y dejan siempre un mal sabor, una mezcla entre sal y limón exprimido en mi marchito corazón.
Y de quererte, pasé mis años olvidado en una trampa para ratones en la que té eras el queso, tú con carrera en el amor y yo en 1º de la ESO para estudiar el primer beso que me diste y ahora te digo que no tienes corazón, que no me dejas elección, que nuestra relación fue un chiste.

No hay comentarios:

Publicar un comentario