Deja que me quede un rato más aquí, sólo hasta que pase la tormenta, déjame que puede que no vuelva a sonreír, quédate conmigo y me orientas. Antes de que suene a despedida la tristeza sostenida que no deja de latir, y antes de que te des por vencida piensa que es la única vida que podemos compartir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario